Monte Nebo

Monte Nebo: qué ver, dónde está y cómo llegar a este lugar sagrado

El Monte Nebo es un lugar sagrado para cristianos, judíos y musulmanes, puesto que aquí es donde se cree que el profeta Moisés divisó la Tierra Prometida, como se menciona en el Deuteronomio del Antiguo Testamento y de la Torá. Por ello, es un lugar que recibe numerosos peregrinos y también es un destino imprescindible para los viajeros interesados en el turismo religioso. En esta página te contamos todo lo que tienes que ver en el Monte Nebo y otros datos prácticos que te ayudarán a organizar la visita.

Tabla de contenidos

Dónde está el Monte Nebo

El monte Nebo es una pequeña montaña que se eleva algo más de 800 metros sobre el nivel del mar, pero su sensación de altura es aún mayor si tenemos en cuenta que el cercano Mar Muerto tiene una altitud negativa (por debajo de los -400 msnm). Se halla a unos 25 km por carretera de esa gran masa de agua salada y a unos 10 km del centro de Madaba, por lo que su visita resulta fácil desde ambos puntos.

Un poco de historia

El monte Nebo está estrechamente ligado con Moisés, profeta para el cristianismo, el Islam y el judaísmo, y sus hechos más importantes los conocemos por la narración recogida en el Deuteronomio. Hasta aquí habría llegado Moisés con el pueblo israelita, al que había liberado en Egipto. Sin embargo, se tuvo que conformar con divisar la Tierra Prometida desde esta elevación natural, pues le fue negado el acceso.

Y es aquí precisamente donde murió Moisés, a la sorprendente edad de 120 años aproximadamente. Sin embargo, la ubicación exacta de la sepultura no se conoce y es objeto de diferentes teorías.

Su conversión en lugar sagrado de peregrinación se debe principalmente a los cristianos, quienes habrían erigido una humilde iglesia en los primeros siglos de historia de esta religión. A finales del IV, una viajera y escritora hispanorromana (nacida en la provincia de Gallaecia) viajó a los lugares sagrados y llegó hasta el Monte Nebo. En ese momento, lo que aquí había era una pequeña iglesia de tres ábsides, a la que se añadió un baptisterio un siglo y medio después, ya en tiempos bizantinos. 

Una basílica mayor se construyó a finales del siglo VI. Para entonces, el Monte Nebo era ya objeto de una importante peregrinación, como sugiere la existencia de hitos romanos que señalizaban el camino hacía aquí.

Tras la conquista musulmana, esta peregrinación fue decayendo hasta frenarse a partir del siglo XVI, momento en que la iglesia quedó abandonada por completo. Pero el descubrimiento del manuscrito de Egeria en el siglo XIX reactivó el interés por el Monte Nebo. Ya en los años 30 del siglo XX, los franciscanos se hicieron cargo de una importante restauración del lugar, así como de los espacios construidos para ponerlo en valor.

Qué ver monte Nebo

Qué ver en el Monte Nebo y sus alrededores

El Monte Nebo no es una simple montaña desde la que divisar el horizonte: cuenta con diferentes espacios históricos y visitables que enriquecen la visita, pues le dan contexto. Estos son los lugares que ver en el Monte Nebo y en su entorno más inmediato.

  • Monumento y mirador: es el lugar donde el visitante realmente se imagina la famosa escena en la que Moisés divisa la Tierra Prometida. Para ayudar a ponerse en dicha situación, existe un panel que explica lo que se ve desde aquí, como Jerusalén (cuando el día es claro), los Altos del Golán y el Mar Muerto. Para conmemorar el episodio, se erigió un monumento moderno, con forma de cruz que realmente simboliza el asta con la serpiente que Moisés utilizó como antídoto contra las picaduras de ese animal
  • Iglesia conmemorativa de Moisés: exteriormente, su aspecto actual es sobrio, fruto de una reconstrucción reciente pero como se puede apreciar, se eleva sobre los cimientos de una basílica bizantina de finales del siglo VI, erigida a su vez sobre otra más humilde del siglo IV. Su interior alberga unos mosaicos espectaculares y muy bien conservados, algunos de ellos con escenas de caza donde el visitante puede divisar animales típicos de aquel periodo. Además de ser iglesia, su interior está musealizado, de modo que encontrará información en paneles que le ayudarán en la comprensión del espacio
  • Espacio de Interpretación: a escasos metros de la iglesia conmemorativa hay un espacio de interpretación del Monte Nebo. En realidad, se trata de un área abierta pero techada, donde se pueden ver otros mosaicos, con paneles informativos que explican la historia del lugar

Estos tres espacios están todos ubicados sobre el Monte Nebo, pero en los alrededores hay otros lugares interesantes, para los cuales tendrás que desplazarte con un vehículo, puesto que la distancia a pie resulta excesiva.

  • Manantial de Moisés: a unos 2,5 km del Monte Nebo. Es uno de los dos lugares que, según la creencia popular, podrían tratarse del manantial de Moisés (el otro está en Wadi Musa). El profeta Moisés habría golpeado con su vara una roca en este lugar, de la cual habría manado agua para dar de beber a sus seguidores. En la actualidad solo hay unos eucaliptos que marcan la hipotética ubicación del manantial, que solo tiene agua si en los días anteriores ha llovido
  • Iglesia de los Santos Lot y Procopio: cerca de la aldea de Khirbet Mukhayaat, a unos 3 km del Monte Nebo. Se trata de los restos de una iglesia bizantina de mediados del siglo VI y, como era costumbre, tenía unos ricos mosaicos que se han conservado de una manera más que aceptable
  • Museo Al Hakaya: en la carretera del Monte Nebo, unos 2 km antes de llegar. Se trata de un curioso museo etnográfico donde se recrean escenas de la vida tradicional de Jordania, a lo largo de su historia: hábitats beduinos, maquetas que representan escenas bíblicas y un largo etcétera, donde no falta una gran tienda de recuerdos para adquirir artesanía típica del país

Además de todo ello, cabe hacer mención a la fortaleza de Maqueronte (Mukawir), que era a su vez el palacio de Herodes el Grande, donde Juan el Bautista fue decapitado por instigación de Salomé. De su ubicación y atractivos hablamos en la página del Mar Muerto.

Cómo llegar al Monte Nebo

Para llegar al Monte Nebo, necesitarás un vehículo que te traiga hasta aquí, pues carece de transporte público, salvo el servicio turístico que ofrece la compañía JETT, conectando Ammán con Madaba, Betania Más Allá del Jordán y este mismo punto. Eso sí: hay numerosos taxis que salen de Madaba rumbo al Monte Nebo, pues es una excursión imprescindible desde aquella ciudad. 

No obstante, lo más cómodo y fiable es disponer de un servicio privado propio que pueda llevarte a todos los lugares que ver en el Monte Nebo y sus alrededores, con la suficiente calma para disfrutar de este lugar tan singular. A la entrada del recinto de la basílica hay un parking donde se puede aparcar el coche.

Si quieres llegar directamente al Monte Nebo desde otros puntos del país, esta es una lista de distancias y duraciones orientativas:

  • Madaba: 10 km, 15 minutos 
  • Aeropuerto de Ammán (Reina Alia): 30 km, 45 minutos 
  • Mar Muerto (Swemeh): 25 km, 30 minutos 
  • Betania Más Allá del Jordán: 30 km, 35 minutos 
  • Jerash: 75 km, 1 hora y 15 minutos 
  • Wadi Musa (Petra): 220 km, 3 horas
  • Wadi Rum: 310 km, 4 horas y 15 minutos 
  • Aqaba: 300 km, 3 horas y 45 minutos 

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