Este circuito por Jordania y Jerusalén te permite descubrir lo más importante del país árabe, añadiendo una excursión de lo más fascinante a esa ciudad sagrada en el vecino estado de Israel. Con esta propuesta de viaje, tu hoja de ruta te llevará por Petra y Wadi Rum, los dos grandes reclamos turísticos de Jordania, sin olvidar otros lugares de enorme interés como Jerash, Madaba o el Monte Nebo. Además, durante vuestra estancia en Jerusalén, habrá tiempo para descubrir la cercana Belén, tan cargada de simbolismo para todo el mundo cristiano. Elige este circuito por Jordania y Jerusalén para vivir un viaje inolvidable, cargado de belleza y espiritualidad.
Los cinco primeros días de este circuito por Jordania y Jerusalén transcurren por tierras jordanas, concentrando en ellos lo más importante de este país árabe… que no es poco. Comienza en la capital Ammán, que tendremos tiempo de describir con una visita guiada, pero también se centra en otros destinos mundialmente conocidos.
Por supuesto, Petra. La que fue capital del Imperio nabateo y conocida como la ‘ciudad rosa’ esconde numerosos secretos y rincones llenos de belleza, que exploraremos durante la jornada completa que pasemos en ella.
Pero hay mucho más. Desde un punto de vista histórico, cabe destacar Jerash, una ciudad grecorromana que a menudo recibe el apelativo de ‘Pompeya de Jordania’. Desde una óptica religiosa, el Monte Nebo y Madaba emocionarán a los viajeros cristianos, así como a judíos y musulmanes.
Y para los amantes de la naturaleza más singular, dos destinos únicos: por un lado el desierto de Wadi Rum, de formas rocosas muy caprichosas; y por otro, el Mar Muerto, considerado el punto más bajo del planeta, a -400 metros con respecto al nivel del mar.
Los últimos días de este circuito por Jordania y Jerusalén se desarrollan en esta última ciudad y sus alrededores, pues está llena de lugares históricos y fascinantes, tanto para los peregrinos y turistas religiosos como para cualquier viajero interesado en la cultura en general.
El listado de lugares a visitar habla por sí solo: el Monte de los Olivos donde se encuentra el Huerto y la Basílica de Getsemaní, el Monte Sión donde está la Tumba del Rey David, el Cenáculo y la Abadía de la Dormición de la Virgen… Y por supuesto, la Ciudad Vieja en la que se encuentran los espacios más sagrados de las ‘tres religiones del Libro’: judaísmo, cristianismo e Islam, que aquí tienen su Muro de las Lamentaciones, la iglesia del Santo Sepulcro y la Cúpula de la Roca.
Además, la excursión a Belén supondrá un emotivo viaje al lugar donde nació el Niño Jesús, epicentro del mundo cristiano en las fechas de Navidad. Sin duda, una experiencia inolvidable que toda persona, religiosa o no, debe vivir en algún momento de su vida.
Este circuito por Jordania y Jerusalén tiene una duración de 8 días y 7 noches, con puntos distintos de inicio y fin: se llega a Ammán (Aeropuerto Internacional de Ammán Reina Alia) y se regresa a casa desde Tel Aviv (Aeropuerto Internacional de Tel Aviv Ben Gurion). Este es el itinerario detallado de la ruta.
El día 1 de este circuito por Jordania y Jerusalén es el de la llegada y la bienvenida. Tras aterrizar en el Aeropuerto Internacional de Ammán Reina Alia, el personal de nuestra agencia os recibirá en la terminal y os dará una primera asistencia. Una vez terminados los trámites fronterizos, os trasladaremos al hotel, ubicado en el centro de Ammán.
En el segundo día de este circuito por Jordania y Jerusalén comienzan las visitas turísticas, en este caso en forma de excursión: después de desayunar en el hotel, saldremos a la carretera para visitar el primero de los tres destinos de la jornada: Ajloun.
En Ajloun, el monumento más destacado es su castillo, que recorreremos para deleitarnos con sus vistas panorámicas sobre las verdes colinas de la reserva natural en que se ubica. Además, conoceremos su arquitectura militar, pues es una buena muestra de la red de fortalezas que las tropas de Saladino y los mamelucos levantaron para defenderse de los cruzados del reino de Jerusalén y de los mongoles, en los siglos XII y XIII, respectivamente.
De Ajloun nos desplazaremos a la ‘Pompeya de Jordania’, es decir, Jerash. Recibe este nombre por tratarse de una antigua ciudad romana que se ha conservado en muy buen estado, a pesar de sus más de 2.000 años de historia. Su Plaza Oval, sus teatros, sus templos, su Arco de Adriano y su hipódromo son algunos de sus lugares más icónicos.
Tras visitar Jerash, regresaremos a Ammán para tomar el almuerzo y reponer energías, pues en la tarde viajaremos al Mar Muerto: aquí dispondréis de tiempo libre para descubrir por qué es uno de los rincones naturales de mayor singularidad. Por un lado, se trata del punto más bajo del planeta (-400 msnm, aproximadamente) y por otro, sus aguas tienen un nivel de salinidad tan alto que el bañista flota sin esfuerzo. Además, sus lodos son muy apreciados en la industria cosmética.
Después de la tarde libre en el Mar Muerto, regresaremos a Ammán donde os estará esperando la cena en el hotel, previo a un merecido descanso en las habitaciones.
Este circuito por Jordania y Jerusalén abandona Ammán en su tercer día. Pero no sin antes desayunar en el hotel y realizar una visita urbana por la ciudad: la capital del país sorprende por su extensa historia con monumentos que impactan, como el Teatro Romano, y por desplegar un ritmo de vida vibrante y típicamente árabe.
Tras dejar atrás Ammán, nos dirigiremos por carretera hacia Madaba: esta pequeña ciudad es conocida por su pasado cristiano, que todavía hoy se hace palpable en muchos de sus rincones. Por ejemplo, en sus restos arqueológicos y en sus iglesias, entre las que destaca la de San Jorge: en su interior se encuentra el mapa-mosaico bizantino de Tierra Santa (siglo VI), considerado la primera representación cartográfica de este territorio que los judíos llaman la Tierra Prometida y los musulmanes, Palestina.
El siguiente destino de la jornada tiene también mucho simbolismo religioso: el Monte Nebo, desde donde el profeta Moisés vislumbró la mencionada Tierra Prometida. Un centro de interpretación explica su contexto y una iglesia con bonitos mosaicos demuestra el culto que se dio a este espacio desde antiguo. Además, un mirador recuerda el episodio bíblico y, si el día es claro, nos permitirá ver el destino final de este circuito por Jordania y Jerusalén.
El segundo tramo de la jornada nos llevará hacia el sur por carretera, recorriendo la Carretera del Rey, que en su momento fue una gran ruta caravanera. En ella se levantaron castillos inexpugnables, como el de Karak, que visitaremos. Se trata de una construcción proyectada por los cristianos cruzados de Jerusalén a comienzos del siglo XII, pero tomada después por el ejército de Saladino.
El final de la ruta de este día concluye en las inmediaciones de Petra (Wadi Musa), cuya exploración dejaremos para el día siguiente. Por el momento, se cenará en el hotel y se descansará de cara a la esperada visita del día siguiente.
Para muchos, el cuarto día de este circuito por Jordania y Jerusalén es el más esperado: aguarda la visita por Petra, la antigua capital de los nabateos que no solo es Patrimonio de la Humanidad, sino también una de las Siete Maravillas del Mundo Moderno. Tras el desayuno y sin tiempo que perder, acudiremos al Centro de Visitantes para entrar en el recinto.
Desde la Tumba de los Obeliscos y a través del espectacular Siq o cañón de entrada, llegaremos hasta su lugar más icónico: el Tesoro, probable templo funerario del rey Aretas III que inmortalizó dos milenios después Indiana Jones. Pero el recorrido va mucho más allá e incluye la Calle de las Fachadas, el teatro nabateo, templos de su religión politeísta y el núcleo de la ciudad romana, con su majestuosa Calle Columnada. Y como broche final, la imponente subida al no menos espectacular Monasterio Al Deir.
Sin duda, una jornada intensa para deleitarse con un lugar que desafía al tiempo y las leyes de la gravedad, y que perdura para siempre en la memoria de quienes tienen la suerte de visitarlo. Unos pensamientos que a buen seguro se harán presentes durante la cena y la noche de descanso, ambos en el hotel de Wadi Musa.
La quinta jornada de este circuito por Jordania y Jerusalén nos lleva por lugares de lo más variado entre sí, todos ellos de una belleza y magnetismo extraordinarios. Tras desayunar en el hotel de Wadi Musa nos desplazaremos al primero: la Pequeña Petra, en la cercana Al Beida, que se llama así por parecer la hermana menor de la antigua capital nabatea. Aquí también hay locales y templos excavados en la roca, un gran cañón que articula el espacio y rincones de lo más sorprendente, que sirvieron de hogar para los beduinos hasta hace no mucho tiempo.
Donde también hubo y sigue habiendo un fascinante ambiente beduino es en Wadi Rum, el siguiente destino de la jornada. Este desierto, que deleitó a T.E. Lawrence (Lawrence de Arabia) y que también es Patrimonio Mundial de la Unesco, es una sobrecogedora reserva natural de montañas escarpadas, dunas de arena roja y caprichosas formaciones rocosas, que recorreremos en buena medida en 4×4.
Wadi Rum será el punto más al sur que alcancemos en este circuito por Jordania y Jerusalén y, terminada la visita, regresaremos por carretera a Ammán para cruzar la frontera hacia Israel. Será a través del cruce del Rey Hussein (o Allenby), con la paciencia y trámites burocráticos que requiere esta formalidad para los turistas. Y ya en suelo israelí, atravesaremos el desierto de Judea para llegar al hotel de Jerusalén, donde espera la habitación para el descanso de esta quinta noche.
Los últimos días de este circuito por Jordania y Jerusalén son muy intensos a nivel religioso, pues nos llevan a los rincones más carismáticos de esta ciudad sagrada para judíos, cristianos y musulmanes. Por ello, tras desayunar en el hotel, aprovecharemos desde primera hora para descubrir todos sus secretos y atractivos.
En primer lugar, el Monte de los Olivos, donde también se extiende el famoso Cementerio Judío y desde donde las vistas de la ciudad son espectaculares. Visitaremos el Huerto de Getsemaní y su Basílica, en el lugar donde fue arrestado Jesús mientras oraba.
Tras ello, entraremos en la Ciudad Vieja para descubrir algunos de sus lugares más importantes, en este caso para judíos y musulmanes: el Muro de las Lamentaciones, que es lo único que queda del antiguo Templo de Salomón, y la Explanada de las Mezquitas, con su famosa Cúpula de la Roca.
La siguiente parada de la ruta se encuentra al sur de la Ciudad Vieja, en el Monte Sion, donde destacan tres lugares cargados de simbología: la Tumba del rey judío David, el Cenáculo donde Jesús protagonizó su Última Cena con los 12 apóstoles y la Abadía de la Dormición, donde la Virgen entró en sueño eterno.
Aún habrá tiempo durante la mañana para visitar otro lugar relevante para turistas religiosos y culturales: el barrio de Ein Karem, donde nació San Juan Bautista y donde se ubica el Museo del Holocausto.
La tarde, en cambio, se dedicará a una excursión imprescindible en cualquier circuito por Jordania y Jerusalén: la ciudad de Belén, lugar de nacimiento de Jesucristo. De hecho, visitaremos la Basílica de la Natividad, que es Patrimonio de la Humanidad y una de las iglesias más antiguas del mundo. Otros templos dignos de ver y que pueden formar parte del recorrido son la iglesia de Santa Catalina y la Gruta de San Jerónimo.
Después de ello, la ruta nos traerá de vuelta a Jerusalén, para una noche de descanso en el hotel.
El penúltimo día de este circuito por Jordania y Jerusalén nos servirá para conocer los últimos e importantes lugares históricos y religiosos de esta ciudad sagrada, así como los atractivos de la zona moderna. Por ello, el desayuno en el hotel nos aportará energía para empezar con fuerza la jornada.
El primer tramo del día lo consagraremos a recorrer los lugares relacionados con la Pasión de Jesús: la Vía Dolorosa con sus 14 estaciones, en especial las últimas ubicadas en la Basílica del Santo Sepulcro, donde Cristo fue crucificado y enterrado. Tras ello, recorreremos también el barrio judío y el Cardo Romano, una de las áreas más pintorescas de la ciudad.
Más tarde, la ruta nos lleva a descubrir una cara muy distinta de Jerusalén: la moderna. Entre los espacios de mayor interés que conoceremos está el Parlamento Judío (Knesset), la residencia presidencial y el Museo de Israel, donde se exponen los Rollos del Mar Muerto y una espectacular maqueta de la Jerusalén herodiana, de tiempos de Cristo, entre otros atractivos.
Terminada la visita al Museo de Israel, habrá tiempo libre para compras y otras actividades de ocio. Y al final del día, esperará en el hotel la última noche de descanso de este circuito por Jordania y Jerusalén.
En el octavo día, nuestro circuito por Jordania y Jerusalén llega a su fin. Tras el pertinente desayuno en el hotel, nuestro chófer os recogerá en vehículo privado a la hora acordada, para llegar con tiempo suficiente al Aeropuerto Internacional de Tel Aviv Ben Gurion. En él, se ofrecerá la última asistencia, en caso de necesitarla, y nos despediremos llenos de gratitud por la confianza y la compañía durante el viaje, que esperamos se vuelva a repetir en el futuro.
Para disfrutar al máximo de este circuito, el paquete de viaje incluye los siguientes servicios:
En este circuito por Jordania y Jerusalén, los siguientes servicios no están incluidos y deberán abonarse aparte:
Agencia de viajes y DMC especialistas en viajes a Jordania privados y a medida
Mandala Tours, S.L, NIF: B51037471
Licencia: C.I.AN-187782-3
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